Yo viajo porque…

Yo viajo porque…

No.

No tengo una respuesta clara al ¿por qué viajas? Menos tengo una al ¿por qué quieres dedicar tu vida a eso, dejando tu -buen- trabajo y familia de lado? Pero hay un algo ahí, un noséqué que me tira de las piernas y me fuerza a tener alas. No. No sé. No lo tengo claro. Pero, ¿saben? no me urge aclararlo todavía. Yo viajo porque…

Dependiendo del día –del clima, del cansancio o del calendario lunar– tengo una respuesta diferente a la pregunta:
– … porque me ahogo
– … porque no sé qué hacer en Chile
– … porque quiero conocer culturas nuevas
– … porque necesito encontrarme
– … porque soy un alma libre
– … porque qué sé ssshooo!

O porque el mundo es tan grande y uno tan pequeño, jaja.

Y así, me voy descubriendo y entendiendo sola, luego de conversaciones largas con esa gente que me pregunta sobre mis razones, porque como he dicho, quizás, soy re mala para el autoanálisis y me cuesta encontrar mis propias respuestas sola. Presiento que un buen psicólogo podría dar con mis verdaderas razones si se dedicara a leer detenidamente todos los post de este blog.

yo viajo porque

Punta del Este – Uruguay -2014

Yo viajo porque un día, nosécómo, me di cuenta que tenía que hacerlo. Me di cuenta que era algo que me llenaba en serio. No me gusta la monotonía, lo fácil, lo cómodo: me aburre todo eso. Me gusta lo nuevo, lo desafiante, lo diferente. Y viajando-lento encuentro eso y más. Conozco gente nueva, espacios nuevos, comidas nuevas, sensaciones nuevas. Un ir y venir de sensaciones nuevas. Se me eriza la piel al pensarlo.

Yo viajo porque, la verdad, no me veo haciendo otra cosa en un futuro cercano. Para mí, el pasado ya pasó y fue lo que tenía que ser, ni más, ni menos. Por su parte, el futuro es incierto, no existe y no está predeterminado. Por lo tanto, lo único que me queda es el presente en mis propias manos. Mío y sólo mío. Y entonces ¿qué más queda si no es aprovecharlo a fondo? No sé qué pueda pasar mañana con mi vida, por lo que mi aquí y mi ahora es lo único en lo que puedo ejercer algo de control.

Además, soy media solitaria. No me aferro mucho ni a las cosas ni a la gente. Y eso es una ventaja considerable en este oficio. Uno al viajar aprende a conocerse a sí mismo, a valerse por sí mismo y a deberse las explicaciones a uno mismo. Y yo en eso estoy algo avanzada. No creo que sea una cosa de crianza o algo así, ah. Como que las vueltas de la vida me moldearon de esta forma, y no fue tanto una cosa familiar o de la niñez.
Al mismo tiempo, soy sociable. Hago amigos de forma fácil. Soy liviana y por eso no suelo tener problemas con la gente en general, lo que es otra ventaja considerable.

Yo viajo porque

Great Ocean Road – Australia – 2016

Desde otra mirada, yo viajo porque me gusta la gente. Me encanta (encantar de encantamiento, de hechizo) la gente. Puedo pasarme horas sentada en un (inserte algún lugar aquí) mirando a la gente pasar, viendo sus reacciones y sus interacciones, tratando de escribirles una historia en mi cabeza. Viajando puedo descubrir gente nueva con su distintas formas de vivir y convivir. Viajando puedo detenerme en nuevas plazas, en nuevas estaciones de metro, en nuevas carreteras, en nuevas playas, y conocer a esa nueva gente. Quién sabe si quizás logro reconocerme en alguna de ellas.

Me pasa que me ahogo frente a mi computador en la oficina. Me pasa que me aburre levantarme en la mañana para hacer lo mismo que hice ayer. Y estoy segura de que esto me pasará viajando también, no lo niego, no soy taaaaan ingenua. Pero tengo la esperanza de que, al menos, al estar en un constante viaje la vida no se me escapará a través de los dedos, sino que la tendré para mí. O como diría Kevin Johansen:

«No quiero pasar la vida sin que la vida pase a través de mí»

yo viajo porque

Saltos del Petrohué – Chile – 2015

Yo viajo también porque me gusta la incertidumbre. Siento que le pone sabor a la vida. ¿Acaso no sería fome estar claro de todo y con todo? Como he repetido aquí, ¡hay tantas cosas que no sé! Y me gusta eso. Por eso también me gusta aprender cosas nuevas, variadas, de todo un poco. Admito que soy pésima reteniendo información. Como he dicho en otros post, mi memoria es mala mala mala (y por eso me gustan las fotos, porque me ayudan a recordar), y lo que aprendo hoy de seguro se me olvidará mañana. Pero me gusta igual. Me gusta saber sobre algo, un tiempo, sin importar si mañana no lo sabré más.

Hay días en que yo viajo porque perdí el miedo y ya no tengo excusas. Me cansé de esperar a estar preparada y me cansé de esa gente que alguna vez me dijo que no podría hacerlo: por ser mujer, porque tengo un crédito universitario pendiente, por verme tan débil, tan niña, porque el mundo es malo allá afuera. Yo viajo porque le hice, le hago y le haré la batalla a esos prejuicios, siempre.

yo viajo porque

Salineras de Maras – Perú – 2014

Finalmente, yo viajo porque para mí la vida se trata de muchas cosas, y una de ellas es hacer lo que nos gusta: viajar me gusta y por eso viajo. Me rehuso a dedicar mi vida a algo que no me guste o que no me llene. Me rehuso a bajar la cabeza y decir sí, asumiendo una realidad que me incomoda, asumiendo un tipo de vida «clásico» impuesto por la sociedad. Mi corazón maquiavelíco -bendito Nicolás– me dice que debo tener mi fin bien clarito, y trazar mi vida paso a paso para lograrlo, cueste lo que cueste. Sé que algunos pueden no estar de acuerdo conmigo en esto de que el fin justifica los medios, pero ya tendremos tiempo de discutirlo en otro post. Por mientras yo, aquí sentada tras mi escritorio, trazo mis jugadas para comenzar mi gran viaje.

Le voy a dar la vuelta al mundo y comenzaré muy pronto.
Espero sus comentarios… sus porqués.

**PS: Este post fue escrito en noviembre del año 2014. Con el tiempo he ido modificando pequeños detalles, cambiando las fotos, agregando razones y re-publicándolo. Pero la esencia es la misma, siempre. Eso no cambia porque yo no he cambiado todavía.

Comments (18)
  1. Vicente marzo 10, 2016
    • La Nico marzo 10, 2016
  2. Gaston Etchart - SamericaXplorer marzo 11, 2016
    • La Nico marzo 12, 2016
  3. Gonzalo marzo 11, 2016
    • La Nico marzo 12, 2016
  4. Andrea Hernández marzo 12, 2016
    • La Nico marzo 12, 2016
  5. Nelly marzo 12, 2016
    • La Nico marzo 14, 2016
  6. Nikki marzo 17, 2016
  7. Fran noviembre 16, 2016
    • La Nico noviembre 16, 2016
  8. Tere Bascuñan Ibarra diciembre 18, 2017
    • La Nico diciembre 19, 2017
  9. Samuel Castillo noviembre 12, 2018
    • La Nico noviembre 28, 2018

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Viajando Lento por Nicole Etchart Opitz se distribuye bajo una Licencia Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional.