Dejé de escribir… y ahora no sé cómo retomarlo
El último post que escribí 100% por motivación propia en este blog fue el de mi experiencia en el curso de meditación en Chile. Que fue EXACTAMENTE hace un año atrás. Después de eso, lo único que he publicado han sido notas de prensa que me van enviando, publirreportajes pagados, y uno que otro texto propio que nace tras la invitación a un tour o a un hotel.
No sé qué fue lo que me llevó a «retraerme». Quizás, en gran parte, todo surge del desgaste que significa mantener este proyecto en pie mientras que en «mi vida real» (que es esa vida del diario a diario, fuera de los viajes) sucedían cosas que me tenían agotada y MAL.
Pasó mucha agua bajo el puente. El estallido social de Chile en octubre 2019 tuvo mucho que ver, pero más peso tenían los altibajos que hubo en mi vida personal y familiar. De forma paulatina fue dejando de dedicarle tiempo a este blog para poder dedicarle tiempo a mi familia, y a mí misma. Pero no voy a entrar en detalles… no tiene sentido.
Lo importante es que hoy, veinte de septiembre del 2020, después de muchos «tengo botado el blog y quiero retomarlo», al fin me estoy reactivando.
Ya hice pequeños ajustes en el menú y recategoricé algunos post que estaban «perdidos» en alguna categoría incorrecta. Quiero darle un nuevo look también, y escribir algunos textos que actualmente solo existen como «notas» en mi celular o alguna libreta. Porque claro, en todo este tiempo no he dejado de viajar, y siempre hay mucho que contar.
Bueno, al menos durante este tiempo sí he mantenido activas las redes sociales que apoyan al blog. Algo es algo. Para que sepan que estoy viva, ajjaja… Pero ya sabemos que esas cuentas podrían desaparecer de la noche a la mañana. En cambio, este espacio permanece. Y esa es la gracia.
Nos vemos por ahí.
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